¿No está Dale por este foro? Con lo que disfruta él con este juego... qué pena...
La verdad es que, como bien han dicho por aquí, una vez que te metes en profundidad, el juego llega a ser desesperante. Yo recuerdo haber dado unas cuantas hostias a la recre cuando estuve con él dándole caña. Requiere hacer todo al milímetro, especialmente si se quiere conseguir el millón de puntos extras por salvar en cada fase al amiguito afeminadillo...
Pero a pesar de sus defectos, es un juego que resulta divertido, y aunque se sufre, también se disfruta al mismo tiempo. ¡Buena elección!